Situado firmemente en el último espolón del Carso sobre el Golfo de Trieste, este castillo es la residencia de una familia principesca. El castillo dispone de obras de arte y raras reliquias históricas. Y además tiene jardines con vista a los vastos horizontes del mar, con sus románticos paseos adornados con estátuas de aquella época y objetos y terrazas panorámicas. Los propiedarios han decidido abrir los jardines y gran parte de su castillo a las visitas públicas, a las conferencias, exposiciones de arte, conciertos, cenas de gala y otros eventos.

Colocados en diferentes niveles, los jardines nos enseñan tapices y cascadas de flores multicolores, que forman manchas de colores de la clásica vegetación mediterránea.

El Castillo en si es una construcción sólida y compuesta dominada por una torre del siglo XVI la cual soporta una estructura cuyas origenes se remontan a 2000 años, como lo demuestra la piedra conmemorativa colocada allí en el siglo tercero para marcar la visita del emperador Diocleciano.

Gracias al entorno natural y la fascinación de ser una antigua residencia solariega y al mismo tiempo una vivienda, el Castillo es sin duda uno de los más atractivos de Europa.

La parte más alta del acantilado da hacia una aldea de pescadores y está rodeada por amplios jardines. En su interior, los muebles, los cuadros, los objetos de valor juntados y collecionados a lo largo de los siglos, regalan al castillo una atmosfera acogedora y elegante, mientras que sus jardines – con sus árboles centenarios, cesped cortado a mano, cascadas de flores y características arquitectónicas – son una invitación a relajarse y a gozar de escapadas. Un sendero que pasa a través de los jardines conduce directamente a la playa privada de abajo.

Durante muchos años el Castillo ha sido uno de los lugares más fascinantes para cenas de gala y eventos de alta calidad, tanto para fiestas empresariales como para fiestas privadas. Se puede alquilar la parte interior o la parte exterior. Una maravillosa puesta del sol en el Golfo de Trieste, la atmosfera muy elegante, el servicio refinado garantizan un éxito seguro de tus eventos.

Puedes recibir a los invitados con un cóctel en los baluartes en la parte más alta del mar, puedes beber los vinos del Castillo, cenar en habitaciones elegantes del Castillo o fuera en el patio y seguir por la noche en las fantásticas habitaciones del Castillo. Es posible también pasar la “primera noche” en una de las habitaciones que recibieron personajes ilustres.